El aporte de vitaminas es esencial para la funcionalidad del sistema inmunológico, ejerciendo distintos efectos sobre este. En este sentido se pueden diferenciar vitaminas:

Antioxidantes como la C y la E, las que actúan sobre la proliferación de las células del sistema inmune como las complejo B y la A y la D que tienen acción moduladora sobre este.

Una dieta adecuada, variada y equilibrada  compuesta de abundantes frutas y verduras es suficiente para cubrir todas las necesidades nutricionales vitamínicas de la población sana pero hay casos en los cuales los suplementos vitamínicos estarán indicados con el fin de aportar una cantidad adicional de estos nutrientes a individuos con riesgo de déficit. Entre ellos:

− Poblaciones con baja ingesta de alimentos como, por ejemplo, niños o  ancianos.

− Colectivos con necesidades vitamínicas incrementadas como el de mujeres embarazadas, los adolescentes y los deportistas, entre otros. 

Artículo escrito por Dra. Daniela Boza

Médico General